martes, 19 de julio de 2011

Koukou Debut. Un amor que sí es correspondido (Parte II de III).

Pasadas ya varias semanas, por fin aquí le stengo la prometida continuación de mi reseña de Koukou Debut, esta vez les presento a los protagonistas de la historia Haruna Nagashima, Yoh Komiyama y a la problemática hermana de Yoh, Asami. Espero que les guste. 
 

Haruna Nagashima: Es la protagonista de la historia. Durante la secundaria dedicó todos sus esfuerzos al equipo de Softball para lograr levantar la copa de oro del torneo, lo cual nunca logró. Al iniciar la preparatoria tenía una nueva meta en mente: conseguir novio y enamorarse. Esta determinación la lleva a pedirle a Yoh, quien se rumora sabe lo que los hombres quieren de una mujer, que se convierta en su entrenador para así convertirse en una mujer atractiva.

Haruna es lo que algunos llamarían “machorra”. Todo su guardarropa está compuesto por ropa deportiva y su cuerpo no es muy femenino sino más bien atlético, por lo que cuando busca vestirse femenina, o más bien lo que ella investigó en las revistas que es femenino, luce ridícula.

A lo largo de la historia podemos ver que Haruna es una chica apasionada en todo lo que se propone, desde el softball, hasta conseguir novio o ayudar a Yoh para que arregle las cosas con su exnovia, a pesar de que eso signifique el fin de su relación.

A pesar de que Haruna es demasiado inocente y buena gente, esto no significa que Haruna sea una chica de telenovela que le encante sufrir y que de estúpidamente su brazo a torcer. Sólo ayuda a aquellas personas que lo merecen y también lucha (incluso a golpes) por lo que ella cree que también merece, como por ejemplo, ser novia de Yoh, cuando todas sus “sempais” le exigen que termine con él porque hay muchas chicas mejores que ella que podrían se mejor novia.

Haruna está profundamente enamorada de Yoh por lo que está dispuesta a hacer todo para que sea feliz. Además, gracias a su naturaleza impulsiva no duda en expresarle su amor, logrando en todo momento que Yoh se sonroje.



Yoh Komiyama: Yoh es el típico chico guapo, tímido y popular; es un gran deportista, buen estudiante y oh sorpresa, odia a las chicas. Sus razones son simples y fundamentadas: una chica le rompió el corazón. ¡¡Pero no sólo le rompió el corazón!! Resulta que como buena chica, fue llorando por todos los rincones del club de basketball (ah porque habrán de saber que ella era la manager del club) y, como ella era el sol de todo el equipo y tenía una belleza sin igual, todo el equipo terminó odiando a Yoh.

Es por esta razón que en un principio rehusó ser el entrenador de Haruna. Pero, tras ver el video del partido final de Softball de Haruna -en donde ella lloraba desconsolada por haber perdido- quedó tan impresionado que decidió ayudarla. La única condición que le puso fue que no se enamorara de él. Promesa que sabemos, no logró cumplir.

En un principio Yoh parece ser una persona agresiva y mal humorada. Podemos ver cómo trata a Haruna con dureza, sin embargo esto se debe a su gran determinación por ayudarla a conseguir su objetivo y a que ella tiene ideas demasiado locas sobre lo que aprende en las revistas, lo que muchas veces lo saca de sus casillas. Es de hecho esa forma de ser tan “auténtica” lo que va cautivando a Yoh y lo que lo hace muy feliz cuando descubre que ella está enamorada de él.

Como podemos imaginarnos, Yoh no es la persona más expresiva que existe, lo cual va muy bien con su personaje; sin embargo, en todo momento podemos ver que está perdidamente enamorado de Haruna. Incluso hace cosas que jamás se hubiera imaginado hacer por otra, como por ejemplo, ser el líder del equipo de animación el día del Torneo de Atletismo de la preparatoria; únicamente para estar más tiempo con ella. Es tan grande su amor que estaba dispuesto a abandonar sus deseos de ir a estudiar a Tokio con tal de hacer feliz a Haruna.

Asami Komiyama aka “Assa”: Es la hermana menor de Yoh. Es una chica caprichosa, berrinchuda y astuta; además, por ser hermosa, siempre busca aprovecharse de cualquier situación que se le ponga en su camino. Y, no conforme con todo lo anterior, tiene el complejo del hermano mayor.

Cuando conoció a Haruna le pareció muy divertido que quisiera que su hermano fuera su entrenador, así que cuando él la rechaza como alumna, ella decide echarle una mano. De hecho, de no ser porque ella llevó a casa el video que Haruna le prestó de su último partido de softball, él nunca hubiera aceptado ser su entrenador.

Asami es muy problemática, principalmente cuando no es el centro de atención. En varias ocasiones la podemos ver haciendo cosas irracionales, al grado de seducir a Fumi por el simple hecho de que Yoh no le permitió que fuera a la cita que su amigo tenía con Haruna.

Aunque Asami parece ser la antagonista de la historia, no lo es. De hecho es una de las mejores amigas de Haruna. A lo largo de la historia podemos ver cómo poco a poco va mejorando su carácter gracias al corazón noble de Haruna y Fumi, quien después del incidente de su cita con Haruna, se convierte en su novio y gran amor (aunque eso no impide que se siga aprovechando de su nobleza).

Por el momento es todo, les recuerdo que en la próxima, y última entrada de Koukou Debut, desarrollaré el perfil de Mami, Fumi y Asaoka, los mejores amigos de Haruna y Yoh.

miércoles, 15 de junio de 2011

Koukou Debut. Un amor que sí es correspondido (Parte I).

Aprovechando que continúo con mi mood de recomendaciones de manga, en esta ocasión te presento Koukou Debut que en mi humilde opinión es uno de los mejores, si no es que el mejor, Shoujo Manga que he leído.

 


¿Por qué?
 
La fórmula es sencilla y es la misma de siempre: Una chica de preparatoria que nunca ha tenido novio y se propone lograrlo, conoce al galán de la escuela que es súper serio y, oh sorpresa, odia a las mujeres. Sobra decir que pasado un tiempo se enamoran y empiezan una relación. Pero, ¿cuál es la diferencia, qué hace de Koukou Debut un manga tan bueno y sobresaliente?
 

Se trata del magnífico desarrollo de personajes. La autora, Kawahara Kazune, emplea la fórmula tradicional: los chicos hermosos, la protagonista sin “pegue” pero de corazón puro (con lo que termina conquistando), el novio popular, los amigos guapos y misteriosos, la hermana celosa, ¡en fin! Son los mismos de siempre, pero tratados de una forma más compleja, más realista, pero sin eliminar la cursilería que tanto nos gusta del shoujo.
 

Es en este momento cuando debo darte una no tan pequeña sinopsis de lo que tratan los 52 capítulos + 1 (éste último yo lo he encontrado por separado de todo el manga por eso lo menciono así) de tan lindo manga y quizá si me dan ganas, te hablo un poquito de los personajes…

 
Haruna Nagashima, exjugadora de softball, inicia su primer año de preparatoria con la firme decisión de enfocar todos sus esfuerzos en tener un novio y conocer lo que es el amor. Tras una ardua investigación en una extensa línea de revistas del corazón, todos los esfuerzos de Haruna parecen no dar resultado. Un día, gracias a un pequeño accidente cuando buscaba ser “ligada” por algún chavo, conoce a Yoh Komiyama, quien al parecer sabe exactamente lo que los hombres buscan en las mujeres.

Al darse cuenta que Yoh asiste a su misma preparatoria decide pedirle que se convierta en su entrenador para poder convertirse en una mujer atractiva y finalmente conseguir un novio. Yoh se niega alegando que odia a las mujeres; sin embargo, al darse cuenta de lo decidida y apasionada que Haruna es cuando se propone algo, finalmente accede con una única condición: que Haruna no se enamore de él.

 
 Finalmente, tras pasar varias experiencias juntos, entre ellas el primer desamor de Haruna, ella termina enamorándose de Yoh. Haruna trata de respetar el trato y resignarse a ser sólo amiga de Yoh, pero al darse cuenta de que lo que siente es verdadero amor termina declarándole sus sentimientos, los cuales son aceptados y así Yoh y Haruna comienzan su relación.

Aquí podría seguir contándote de qué trata la historia hasta llegar al final, pero prefiero mejor explicarte un poco de los personajes para que te des cuenta cómo es que Kawahara Kazune desarrolla la historia.

 
¡Pero! Lo dejaré para otro post porque creo que por el momento ya fue mucho y esto se trata de entretener, jejeje.

 
En la siguiente entrada te hablaré de Haruna Nagashima, la protagonista, el popular Yoh Komiyama y de su hermana Assa. Y para la próxima entrada finalizaré con la descripción de la mejor amiga de Haruna, Mami Takahashi y los mejores amigos de Yoh: Fumi y Asaoka.

 

¡Espero que te guste!

jueves, 2 de junio de 2011

Usotsuki Lily. La historia de una chica enamorada de ¡un trasvesti!

En esta ocasión me he animado a escribir sobre un manga que he estado leyendo el cual es un tanto extraño.
Ok, lo acepto, en general tooodos los mangas tienen una temática un tanto retorcida, pero Usotsuki Lily cuenta una historia un tanto más singular de lo normal.
No haré un copy-paste de la sinopsis que seguramente manejan todas las páginas de internet porque pues para eso están las demás páginas, así que déjenme pensar......................................



¡Lo tengo!

La historia comienza cuando a Hinata Saotome, se le declara un compañero de su escuela, En Shinohara, que sobra decir, es guapísimo. Hinata primero duda que la declaración sea real, pero luego de pellizcarse la mejilla y darse cuenta de que no está soñando, no duda en decirle que sí.

La felicidad y el romance de la juventud llega a la vida de Hinata, o al menos eso es lo que ella piensa que sucederá, ya que no pasará mucho tiempo para que Hinata se de cuenta que En, es nada más y nada menos que aquel chico freak de la escuela que le gusta vesitrse de mujer ¡y no cualquier mujer! sino una que es definitivamente mil veces más linda que ella.

Hinata decide retractarse con En, pero al intentar terminar con él se da cuenta que la razón por la que él se viste como mujer es porque le gustan demasiado las mujeres, tanto que desea incluso ver a una mujer en el espejo y ¡además! los hombres le parecen seres repulsivos, incluso su propia apariencia le provoca romper cualquier objeto que refleje su imagen.

La verdad es que Hinata medio lo comprende, pero la razón oculta (bueno ni tan oculta) por la que no termina por él es porque en su mente sigue presente que debajo de esa chica súper linda, se encuentra un hombre muy, pero muy atractivo, justo la debilidad de Hinata. Así que, pensando que tarde o temprano él desistirá en vestirse de mujer, decide seguir saliendo con él.

Usotsuki Lily está lleno de un montón de cosas singulares, las personas más conservadoras quizá no se sientan atraídas en primera instancia por la trama e incluso en algunas escenas podrían sentir un poco de "aberración". Sin embargo, dentro del género shoujo lo podríamos considerar dentro de las series más inocentes.

Además, podemos agregarle un gran plus, que es la limpieza con la que Komura Ayumi, la autora de este manga, trabaja. Los trazos son limpios y podemos ver una gran fluidez en cada uno de estos. Si de apreciación estética se trata, Usotsuki Lily es un manga que no deben dejar pasar.

jueves, 27 de enero de 2011

Lágrimas de no sé qué...



Lágrimas de sangre,
lágrimas dulces,
lágrimas saladas,
de miel,
de hielo,
de cristal,
lágrimas amargas...
lágirmas de amor,
de satisfacción,
de ira,
de envidia,
de tristeza...
de todas las formas inventadas
y que atrapan mi pequeña libertad de elegir...

viernes, 21 de enero de 2011

Barreras

Ernesto se levantó de la cama, volteó a ver a Eulalia quien seguía plácidamente dormida. Él no pudo evitar rosar con el dedo índice de su mano la espada desnuda de ella; después de casi un año de desearla tanto por fin había logrado hacerla suya. Sin embargo, Ernesto sabía que aquel momento no había sido un triunfo de su galantería, era un triunfo del alcohol.
Eulalia había llegado la noche anterior con varias copas encima, estaba muy contenta, había logrado un contrato jugoso con una de las empresas más importantes del país y quería compartir la alegría con uno de sus mejores amigos, Amado, el compañero de casa de Ernesto.
Amado había ido a pasar la noche con Leo, su pareja desde hacía 8 meses y Ernesto se había quedado sólo en casa a disfrutar una copa del vino que tanto le gustaba. Por ello y por su deseo desmedido hacía Eulalia, no dudó en insistirle para que pasara a brindar con una copa de vino su triunfo.
Eulalia normalmente no hubiera aceptado la oferta de Ernesto, era una chica controlada y conocía perfectamente los deseos de Ernesto. Muchas veces había tenido la sensación de que él la desnudaba con la mirada cuando visitaba a Amado en su casa; a veces le parecía muy halagador, saber que alguien la encontraba desmedidamente atractiva era algo que podía subirle la autoestima a cualquiera; sin embargo había otras veces que lo encontraba totalmente repulsivo y desagradable. Ernesto era un joven atractivo, pero cuando se lo proponía podía ser sumamente vulgar, cosa que sucedía a menudo.
Ernesto también sabía perfectamente lo que ella pensaba de él y la realidad era que a él no le importaba, sólo tenía ese deseo loco de poseerla y ahora no sabía cómo sacarla de su cama sin que su forma de ser tan altanera y prepotente creara un conflicto que pudiera afectar su amistad con Amado, quien quería a Eulalia como una hermana menor a la que había que proteger.
Eulalia no estaba dormida, llevaba más de 10 minutos despierta, esperando a que Ernesto decidiera salir del cuarto para poder escabullirse de él, no deseaba hablar con él, al menos no en ese momento. Al igual que a él, a ella tampoco le importaba Ernesto, pero odiaba la incomodidad que genera las relaciones, por eso se había negado a ser parte de una relación casual o de una noche, las más problemáticas para su gusto.
Ernesto abrió el cajón del buró de su cama y sacó una paleta de dulce, una gran bola roja con el centro de chicle. Nuevamente volteó a ver a Eulalia, removió con su mano el cabello que le cubría el rostro y se le quedó mirando un momento, ¿qué era lo que tanto le había atraído de ella? Sí, era una mujer guapa, pero no se acercaba a las bellezas con las que Ernesto había estado, comparada con las otras, Eulalia era una joven totalmente ordinaria, ¿qué era entonces? Simple, Eulalia, hasta la noche anterior, se había negado  de la manera más fría, cortante y humillante (al menos para él) a los encantos de Ernesto.
Por tal motivo Ernesto tenía unas ganas locas de sacar a relucir su patanería y vulgaridad en contra de Eulalia, burlarse de ella, todo un año despreciándolo y en una noche de copas había bajado totalmente su guardia.
Pero estaba Amado, el bueno, amable y generoso, la única persona que Ernesto quería, además de él mismo. Lastimar a Eulalia era lastimar a Amado. Amado, la única persona que le tendió la mano, que supo leer sus pensamientos tormentosos y lo aceptó. No sólo eso, gracias a él, tenía el trabajo soñado y vivía en un lugar increíble.
No tenía deseos de lastimarlo, sólo debía sacarla de la casa de la forma más amable, pero en el ego de Ernesto, Eulalia ya estaba enamorada de él, ¿cómo no lo iba a estar si el sexo había sido increíble? Tenía que sacarla de la casa sin que ella se sintiera herida o despechada, además debía convencerla de que no le dijera nada a Amado, así y sólo así, todo estaría bien con él.
Eulalia ya no pudo esperar más, abrió los ojos, tomó la sábana que la cubría y se sentó de espaldas a Ernesto…y nada, ninguno dijo nada.
Con la mirada Eulalia comenzó a buscar su brassiere. Ernesto se dio cuenta y lo recogió del suelo, tenía ganas de aventárselo con fuerza hacia la espalda, de aventarle toda su ropa, pero una vocecita sonó en su mente: “Amado”. Así que, finalmente arrojó toda su ropa a un lado de ella.
Ella sólo se limitó a voltear y mirarlo, tomó la ropa y comenzó a vestirse sin preocuparse por la mirada de Ernesto, quien la veía fijamente mientras se enrollaba una toalla en la cintura. Y así  de pronto, se daba cuenta que el deseo había desaparecido.
Pero el ego, el ego no se iba, Ernesto estaba seguro de que Eulalia ya no podría vivir sin él.
¿Y Eulalia?, en ella también el ego se desbordaba, pensaba que él no la iba dejar de acosar para tener un segundo encuentro, un tercero, cientos de veces.
Si tan sólo alguno de ellos abriera la boca…
Eulalia terminó de vestirse y se levantó, Ernesto también lo hizo; ambos salieron de la habitación. Ella buscaba con calma pero con desesperación sus llaves y su bolsa. Encontró su bolso, Ernesto le dio las llaves.
Sin decir nada, sin siquiera mirarse, ella salió del departamento y luego del edificio. Ernesto miraba por el balcón cómo Eulalia se subía al carro y se alejaba.
En la esquina, un atractivo joven los observaba mientras fumaba un cigarro.

FIN.